A mi mujer le diagnosticaron un cáncer de mama y optaron por quitarle el pecho. El sistema en Dinamarca es complejo, te cubre el gobierno y puedes tomar la quimioterapia estándar y ella lo hizo. La quimioterapia le ayudó durante un año y medio, luego el cáncer volvió a aparecer como triple negativo en los linfáticos. El SES surgió cuando le salió tanto líquido alrededor del corazón y de los pulmones, que sólo teníamos una opción para saber dónde conseguir otro tratamiento. Empecé a buscar en internet y encontramos Immucura. Todo era nuevo para mí y este parecía ser el tratamiento adecuado para ella. Todo estaba bien con Immucura, teníamos un gran equipo y eran fantásticos. Era el mejor lugar en el que podíamos estar en ese momento. La diferencia entre el DCT y los tratamientos convencionales es que el DCT utiliza el cuerpo como arma contra el cáncer y no te hace enfermar, puedes seguir trabajando, es todo un mundo nuevo. El mundo debería tener los ojos puestos en este tratamiento, dentro de diez años, con suerte, todo el mundo va a optar por este tratamiento. La nutrición es esencial no sólo para el paciente sino para toda la familia, uno hace lo mejor para su cuerpo, así que también hay que creer en la nutrición. Cuando te encuentras en esa situación es difícil y tienes que tomar una decisión rápida. Hay que buscar una segunda opinión, no sólo de tu propio médico, sino de otra fuente. Es importante que la gente conozca el tratamiento DCT. Mi esperanza para el futuro es que todos los pacientes puedan recibir este tratamiento.